No sé qué tan bueno sea para mí contemplar tu retrato, mi profesor ha dicho, que cuando se retrata se ve con otros ojos, se ve como en realidad son las cosas. Y esos ojos tristes me contemplan fijamente, me revuelven los sentimientos, me entristecen el alma. Cuando te veo jamás es así, tu mantienes envuelto por un purpura oscuro (que tal vez es solo el color con el que he querido verte), tu -> libertad, tu -> sueños, tu -> dulzura y pasión, te veo en las noches caminar entre sueños y beso tus labios libre de miedos.
Niño crédulo de mis locuras, tocaré una vez más para ti las notas al viento, buscaremos la armónica en el momento eterno, cantaré una canción más antes de sentir tu cuerpo, apagaremos el mundo, crearemos el nuestro, yo sueño, sueño con tus besos, la cabaña en la playa, las olas y el viento.
Prometí no arrepentirme de no irnos, pero quien sabe donde estaríamos ahora, ¿Puedes imaginarlo?
Un brillo en tu mirada, si lo preguntas es por eso que te lo propuse a ti, una expresión de libertad, yo sabía que aceptarías.
Y me iría ahora mismo si tu quisieras, viajaríamos al infinito si se pudiera, saltaríamos al abismo si aquí estuvieras, eres “tu” si yo sé que eres “tu”. El que va hasta la última calle de la ciudad preguntándose si algún día la cruzará, así como yo. Y late al mismo tiempo en mi pecho, corazón que desea salir, correr en el viento. Espiral de mariposas de los besos en puente, de las risas, tú y yo inmersos.
¿Sabes que un día soñamos y corremos, y al siguiente somos solo huesos? No quiero perder más tiempo, escapémonos de todos y de todo, huyamos al vacío, libre de ruido, dame tu mano y toma mis miedos, ven conmigo, amémonos en silencio.
Dory
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