martes, 25 de septiembre de 2012

Espantos.


Espantos a blanco y negro,
espantos al rojo vivo,
espantos que me encantan,
de purpura y de luces blancas.

Espantos desgarrados,
que van gritando,
que son silencio y que son ruido,
espantos oscuros que cubren tristeza,
espantos que te atraviesan.

Espantos que tienen fuerza,
espantos que me observan,
espantos que cubren,
pero que destapan una parte de quien es,
espantos que entiendo, y que no entiendo al tiempo,
espantos que me permiten entenderlo,
espantos, su parte oscura.

Espantos que lo espantan,
espantos, sus amigos,
espantos enemigos,
espantos sin sonrisa,
con dientes de puntilla,
espantos irónicos,
que asustan y maravillan,
espantos que se esconden…
y lo esconden.

Gotas de agua


El silencio se mantiene,
mi mente también hace parte de ese ambiente,
el techo no es tan entretenido como siempre,
irrumpe la aburrida tranquilidad,
su golpe en el piso,
una tras otra,
me acompañan levemente,
me hacen recordar el porqué puedo oírlas tan claro,
la falta de algo que me entretenga para ignorarlas,
en la ventana, un color rojizo,
hace que una tarde de septiembre,
pretenda ser de agosto,
esta vez el otoño casi ha pasado inadvertido…
Ha llovido tan fuerte,
y ahora parece que nada hubiese pasado,
una especie de paz en el aire,
que aunque es agradable,
es profundamente detestable,
cerrar los ojos es inútil,
de todas maneras, es más sencillo y además mejor,
intentar calmar una tristeza o sacar a flote la felicidad,
pero ¿Qué hacer cuando las gotas de agua son lo único que importa?

Organizar.


Esa es la magia de organizar,
encontrarse con todas esas cosas perdidas,
leer cosas estúpidas,
encontrar eso que alguna vez fue un sueño,
y que ahora es una pérdida de tiempo,
entrar en melancolía,
una extraña melancolía,
de esas vacías, de esas sin dolor,
días pasaron desde que todo se abandonó,
pero ahora esos días son años,
pronto será décadas,
no bastará mucho para confirmarlo,
hay algo claro, no hay manera de que cometa esos errores de nuevo,
no hay manera de que alguien mate ilusiones,
porque ya están muertas,
 porque ya son parte de ese mundo real… realista,
oscuros pensamientos, sin luz propia,
oscuros pensamientos, que no encontraran luz,
oscuros pensamientos, diferentes a los astros que eran,
oscuros pensamientos, dignos de ser pronunciados, dignos de ser aclamados,
pero con todo esto, muertos, muertos siguen y muertos seguirán.
Agua, pintura, voz, luz y astros, lo que no tengo, ni tendré.

martes, 18 de septiembre de 2012

El lugar al que pertenezco


De tantas personas a las que he decepcionado,
por fin encuentro un motivo,
si tan solo ellos lo entendieran como yo,
si tan solo ellos no fueran cuadrados en sus cuadradas vidas,
si tan solo fueran abstractos podrían comprender
y ver las cosas desde este punto,
como si fueras a morir mañana,
como si ya no hubiera un futuro,
si tan solo pudieran verlo desde mi vista existencialista,
comprenderían que para mí lo que no deseo no tiene sentido,
tal vez verían que no es un capricho de toda la vida,
de nuevo a mi misma me justifico,
es que tal vez tenga razón y solo estoy buscando el lugar a donde pertenezco,
por eso me emociona la  idea de estar tan lejos de aquí,
de encontrar paz y silencio,
de alejarme de la rutina y lo seguro,
si tan solo entendieran que no hay nada que temer si haces lo que deseas,
que nada puede vencerte si crees en ti y lo que haces,
que en realidad sus papeles verdes no son tan necesarios como parecen
y que la única manera de ser libre es alejarse de esta sociedad.

Inmortalidad


Si alguien me pidiera definir este día en una sola palabra diría: Inmortalidad.
Por el cielo gris casi azul,
por el aire caliente casi frío,
por pasto húmedo que da la sensación de un ambiente tropical,
por esas tristezas que no siento ya,
por esa ilusión de llegar al lugar donde pertenezco,
por el sonido dulce del agua circulando en una fuente,
por  las gotas que caen fuertemente, por mi cabello mojado,
por la tormenta que hace ya un buen rato no venía,
por no sentir esas ganas de huir,
por los charcos en los que jugamos,
por el viento fuerte que trataba de llevar mis lisos con él,
por la melancolía que se olía,
por las risas y los gritos de los niños disfrutando de la tormenta,
por el sol de la madrugada,
y la esperanza que el aire traía consigo.
Si alguien me pidiera definir este día en una sola palabra diría: Inmortalidad.
Siendo ilógico,
que hoy no haya pasado nada importante
y que por ende no sea más que un día perfecto,
pero de efímeros recuerdos.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Odio.

Ahora odio tus palabras,
odio tu risa,
odio tus chistes,
odio tus despedidas,
odio tu tono compasivo,
odio esa voz con la que me hablas,
que tiene ese toque un tanto frío, un tanto vacío,
desinteresado, aburrido, perdido,
odio hablar con ese desconocido,
odio ser tu amiga,
odio no ser tu todo.

Pero aún así sigo amando todo de ti,
es imposible no hacerlo,
es imposible no recordarte,
es imposible no desearte,
es imposible no quererte conmigo,
es imposible no tratar de recuperarte,
para echar al vacío a ese desconocido en el que te has convertido.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Soy una bruja.


Soy una bruja,
una bruja que vuela sin escoba y sin sombrero,
en una cicla y con pocos agüeros.
Soy una bruja,
una bruja de uñas cortas y nariz pequeña.
Soy una bruja,
una bruja silenciosa y nocturna,
una bruja de pestañas cortas,
una bruja encantadora y peligrosa.
Soy una bruja,
de esas que hechizan,
una bruja muy callada,
una bruja que lleva e l cabello despeinado con el viento,
una bruja de ojos marrones y tristes,
una bruja de boca purpura
una bruja de lágrimas dolorosas,
una bruja de pupilas 
sonrientes.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Nuestro juego


Nosotros ya somos una ilusión…
pero jugamos a olvidar el futuro,
a disfrutar del presente,
yo juego a reírme de tus chistes,
tu juegas a amar mi risa,
yo juego contradecirte,
tu juegas a enojarte,
yo juego a enviarte besos agripados,
tu juegas a imaginarlos,
yo juego a cantar canciones de amor,
tu juegas a escuchar mi voz,
jugamos a ignorar lo que viene,
tu juegas a esperarme,
y yo… yo juego a quererte
más de lo que quisiera hacerlo.
Qué es malo, o qué es bueno…
que importa… sigamos jugando a que nada está definido.

jueves, 6 de septiembre de 2012

Otra noche estrellada


La maldita sensación de no poder expresar nada, de estar atrapada, maldita sea! Hasta en mis versos estoy presa, maldita sea! He de buscar libertad con todas mis fuerzas.
Quiero decir mucho más que solo eso en una noche fría de cielo estrellado y sentimientos desoladores, de maquillaje corrido, de respiración agitada, de no encontrar las palabras, de frío en el pecho, de fuerzas para salir corriendo, quiero decir mucho más que eso y que las versos fluyan como el río, que el llanto sea espontáneo y el insomnio lejano. Pero estoy atrapada y no puedo. Pero la presión en mi pecho no quiere salir hoy.
Ojitos tristes - me preguntó - ¿Qué te pasa hoy?, ¿He de verte feliz algún día? ¿Quizá de pronto por medio del papel podré conocer tu sonrisa? ¿Qué hay de tus lágrimas? ¿Por qué solo puedo ver tu dolor? ¿Por qué esa incapacidad de transmitir lo que falta? ¿Seguirás huyendo siempre? ¿Me dirás quién eres? 

martes, 4 de septiembre de 2012

La luz del día.

Fue solo cuando perdí la calma que quise buscarla,
fue solo cuando el silencio se marcho que se acabó el amor,
los truenos sonaron y las luces se apagaron,
aún sin compañía los gritos invadían,
el viento se llevó lo que algún día quise yo,
y tratando de buscarlo me encontré en un lugar mejor,
sin rastros de lo que perdí,
el sol se asomó entre las nubes comprendiendo el frío de mi corazón,
calentó tan fuerte como pudo
y trayendo consigo la luz me arropó,
de momento ya no estaba huyendo,
y el cielo se oscureció,
el frío fue tan fuerte y tan confortador,
el viento fue el consuelo, el agua la comprensión y el sol la fuerza que me impulsó.
Y al anochecer se despidió de mí la naturaleza
y desde entonces prometí,
buscarla todos los días en la normalidad de mi rutina.

domingo, 2 de septiembre de 2012

El miedo en su mirada.

Caminaba lentamente esta mañana sin rumbo fijo y sin saber a donde ir para matar el tiempo, de repente me di cuenta de que la calle estaba casi sola y solo un joven alto, delgado, de tez pálida, poco cabello, piercings en su ceja, su labio y su oreja, de aspecto no muy confiable se me acercaba lenta y directamente, mire a mi al rededor y ya no había nadie cerca, tuve mucho miedo y trate de acelerar el paso para esquivarlo, entonces me hablo con una voz suave e insegura - Oye es que no soy de aquí y no tengo para el pasaje...- y sin poder comprender la situación aceleré mi paso un poco más y respondí rápidamente que no podía ayudarlo (y era cierto, pero en este momento hubiese preferido decirlo en otro tono, aunque no haya contestado de mala manera).
Cuando me encontraba a unos pasos del lugar, voltee a mirarlo y me encontré con su mirada, al contrario de lo que yo hubiese hecho en otra situación permanecí observándolo directamente a los ojos y fue solo en ese momento que pude comprender que su mirada aterradora que me había asustado no era más que miedo de ser rechazado.